En mi ciudad hay un terreno de pastura, dos caballos viven allí, de lejos, parecen caballos como todos, pero cuando se mira bien, se percibe que uno de ellos es ciego, aun así, el dueño no se deshizo de él y le consiguió un amigo. Un caballo más joven, eso ya es de admirar.Si prestas atención, oirás una campana, buscando de donde viene el sonido, veras que hay una pequeña campana en el cuello del caballo menor, así el caballo ciego sabe donde esta su compañero y va hasta él.
Ambos pasan los días comiendo, y al final del día, el caballo ciego sigue al compañero hasta el establo, y tu percibes que el caballo con la campana esta siempre mirando si el otro lo acompaña y, algunas veces, pára, así el otro puede alcanzarlo, y el caballo ciego se guia por el sonido de la campana, confiando que el otro lo esta llevando por el camino cierto.
Como el dueño de esos caballos, Dios no se deshace de nosotros solo porque no somos perfectos, o porque tenemos problemas o desafíos, él cuida de nosotros y hace que otras personas vengan en nuestro auxilio, cuando lo precisamos.
Algunas veces somos el caballo ciego, guiado por sonidos de las campanas de aquellos que Dios coloca en nuestras vidas.
Otras veces, somos el caballo que guia, ayudando a otros a encontrar su camino, y así son los buenos amigos, tu no necesitas verlos, pero ellos están ahí.
Por favor, oye mi campana, yo tanbien oiré la tuya.
Verdaderamente precioso, una gran verdad y muy necesaria en estos tiempos de hoy día. Este lugar, blog es una de las mas grandes maravillas de este mundo y del venidero. Gracias por tu gran aportación a hacer de este mundo uno mejor y animarnos a ser mas humanos unos con los otros. Saludos grandiosos y bendiciones.
ResponderEliminarEn eso consiste la fe, en andar, en confiar, aunque no veamos.
ResponderEliminarNo siempre las cosas son fáciles, pero siempre hay un motivo. Unas veces lo veemos claro y otras no, y hemos de confiar siempre en que Dios controla la situación y hará lo mejor para nosotros.
Un saludo y bendiciones.
Eso demuestra que para tener fe, confianza no hacen falta los sentidos, basta con confiar... Dios tiene el control, entonces ¿Por qué preocuparnos?
ResponderEliminarDios te bendiga y te siga usando.
Saludos
Hola mi linda amiga, linda reflexion, si el señor no nos deja, sino que siempre va con uno.amiga me alegra mucho que estes de vuelta
ResponderEliminarte deseo una linda semana.
Muy linda historia amiga Sacri, es increíble que ocurran historias como éstas y ojalá, nosotros los humanos, aprendamos de ellas. Un beso
ResponderEliminarHola, soy Gara, como bien dije, sabia q un día regresaría y de nuevo me encuentro entre vosotros, vengo a invitarte a q inicies conmigo esta nueva travesía, por el Jardín.
ResponderEliminarBesos.
Sacri, pasan cosas maravillosas en la vida, como esta historia que nos hace reflexionar, confiar y creer que Dios existe.
ResponderEliminarBesitos, cielo!
Si observamos bien, encontraremos muchas reflexiones en la naturaleza, pienso que Dios nos habla a través de ella, él pone esas cosas ante nuestros ojos, para que meditemos en él, para que veamos cómo se produce la vida desde su mirada. Dios nos va dejando señales, nos deja su huella y su Espíritu en nosotros nos muestra la lección, es hermoso como Dios se ocupa de nosotros, él siempre está en todo lo que es sublime, como la historia de estos animalitos que nos enseña hoy tanto.
ResponderEliminarHermoso amiga y hermana, me estoy poniendo al día, voy poco a poco.
Me encantó el tema musical que tienes, no lo había escuchado de Fonsi, hermosa canción.
Un abrazo enorme enorme
Anouna
Araunapeka
Anita María